En el programa “Podemos Hablar” de Chilevisión, la exanimadora Cecilia Bolocco compartió el doloroso momento en que su hijo Máximo fue diagnosticado con un tumor cerebral. Todo comenzó con unas jaquecas que sufría el adolescente de 14 años, sin sospechar la gravedad de la situación.

Según narró Máximo, quien también asistió al programa, se despertaba todos los días con fuertes dolores de cabeza y vómitos, lo que alertó a Bolocco.

El inicio del calvario

El 13 de noviembre de 2018, Máximo tuvo que ir a la clínica por el mismo dolor, acompañado por un chófer mientras su madre estaba en una sesión de fotos. Inicialmente, le dijeron que era una migraña, pero Cecilia insistió en que le hicieran un escáner. La llamada que recibió después le informó que algo no estaba bien.

Al llegar a la clínica, Cecilia se enteró de que Máximo tenía un tumor cerebral del tamaño de una pelota de tenis. “Me dijeron que no era ni chico ni grande, era enorme”, aseguró. La incertidumbre la invadió y solo pensaba: “Dios mío, ¿qué hago? tengo que tomar las decisiones más importantes y no sé qué hacer”.

Bolocco describió la situación como una caja de Pandora que traía nuevos problemas cada vez. “Era algo más oscuro que lo anterior. Si en un momento dijeron que Máximo tenía un pronóstico muy malo, cada vez parecía ser peor”.

El día más negro de su vida

“El 27 de noviembre fue el día más negro de mi vida”, recordó. Ese día, tras una biopsia, se enteró de que el tumor era cancerígeno y le dieron a su hijo una esperanza de vida de dos años. “Le pregunto por la expectativa de vida y me dijo 75/25, 75% que no funcionara… En la mañana era un niño sano, a las 3 de la tarde estaba hospitalizado y a las 4 de la mañana tenía un tumor grande y a la semana le quedaban dos años de vida”, aseguró, señalando que su hijo nunca supo lo que dijeron los médicos.

“El tumor me hizo darme cuenta de lo linda y delicada que es la vida”, dijo Bolocco. “Cuando uno siente que la vida se desarma, se rompe, se quiebra y cruzas esa noche oscura, cruzas ese túnel sin luz y llegas al otro lado, hay una luz tan resplandeciente, que, aunque sea pequeña, la valoras. Entonces hoy valoro todo”, afirmó.