En el episodio de Top Chef de este miércoles, se presentó una situación inusual, específicamente durante una prueba en equipos para preparar una torta.

En medio de la competencia, los chefs sorprendieron a todos con un anuncio que generó gran atención: debían golpearse con un huevo en la frente, y aquellos cuyo huevo se rompiera quedaban eliminados de la prueba, observando desde lejos a sus compañeros.

En un giro inesperado, Jordi Castell, tras algunos intentos, resultó siendo el elegido, lo que lo llenó de molestia.

La frustración de Jordi

“Me están perjudicando gravemente, los detesto”, expresó Jordi, aunque el chef Benjamín Nast rápidamente lo calmó.

“Escogiste a tu equipo, confía en ellos. Continúa”, aconsejó el fotógrafo para que se tranquilizara.

“Lo que sucedió fue extremadamente desagradable. Mi única intención era estar junto a mis compañeros, especialmente en la fase de montaje”, relató Jordi en las entrevistas que se realizaron después, fuera de la cocina.

“Esto no tiene nada de humorístico. Esta prueba es la más traicionera que podría haberse planteado… es pura malicia”, insistió Castell con su protesta.

A pesar de todo, el resto de su equipo, formado por Pincoya, Carlyn Rompero y la Zapallito Italiano, brilló en la presentación y la torta recibió elogios unánimes por parte de los jueces.