En el mes de febrero, se incrementa el monto de un relevante beneficio social. Aunque el Bono Dueña de Casa, oficialmente conocido como Bono de Protección, está destinado a beneficiarios de diversos perfiles, son principalmente las mujeres quienes obtienen mayores ventajas de este programa.

No es necesario realizar una postulación específica para acceder a este subsidio, ya que el pago se realiza de forma automática. Sin embargo, es esencial cumplir con un requisito fundamental para garantizar la percepción del beneficio.

Requisito esencial del Bono Dueña de Casa

Para ser beneficiaria de este bono dirigido a mujeres, simplemente es necesario formar parte de una familia beneficiaria del subsistema Chile Seguridades y Oportunidades y participar en uno de sus programas: Familias, Abriendo Caminos, Calle o Vínculos. Con esto, el pago se efectúa de manera segura y automática.

Montos y Aumento del bono para mujeres

Aunque aún no se ha comunicado oficialmente el aumento de los montos del Bono de Protección para febrero de 2024, se espera que experimenten un incremento gracias a la variación positiva del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en 2023. A modo de referencia, los valores del año pasado fueron los siguientes:

• Primeros 6 meses: $21.823.
• Mes 7 al mes 12: $16.608.
• Mes 13 al mes 18: $11.419.
• Mes 19 al 24: $20.328.

Modalidad de Pago

El pago del aporte se realiza en la Cuenta RUT registrada a nombre de la persona designada como beneficiaria. En el caso de no poseer una Cuenta RUT, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia gestionará la apertura de dicha cuenta en BancoEstado, sin costos ni trámites adicionales para la usuaria. En este escenario, la persona encargada de cobrar el bono deberá dirigirse a una sucursal cercana del banco para retirar la tarjeta (plástico) y así efectuar el cobro.

Duración del Beneficio

El Bono Dueña de Casa se concede por un período de hasta dos años, siempre y cuando la beneficiaria participe activamente en los programas del subsistema Seguridades y Oportunidades. La renuncia voluntaria o el incumplimiento de los deberes establecidos al momento de firmar la participación en el subsistema pueden resultar en la pérdida del beneficio.