Última imagen del tripulante del ‘Cobra’ inquieta a todos: extraño comportamiento previo a su desaparición
Se reporta la desaparición de Juan Sanhueza, tripulante del barco “Cobra”, tras la tragedia del hundimiento de la lancha “Bruma”.

El pasado sábado, se reportó la desaparición de Juan Sanhueza, un tripulante de 58 años que formaba parte de la tripulación del barco Cobra, actualmente bajo investigación por su posible vinculación con el hundimiento de la lancha Bruma. Este incidente, ocurrido frente a las costas de Coronel en la región del Biobío, dejó a siete pescadores artesanales desaparecidos desde el 30 de marzo.
Los detalles de la desaparición de Sanhueza
Juan Sanhueza había salido de su hogar en Coronel la mañana del viernes con el propósito de asistir a una cita con un profesional de la salud mental, organizada por la empresa propietaria del Cobra, la pesquera Blumar. Este acompañamiento emocional estaba destinado a ayudar a los miembros de la tripulación a lidiar con el impacto emocional del trágico suceso. No obstante, tras salir a las 09:00 de la mañana, Sanhueza nunca llegó a la cita ni regresó a su hogar.
Su hijo, Pablo Sanhueza, quien fue el encargado de realizar la denuncia ante la Policía de Investigaciones (PDI), declaró: “Él salió a eso de las 09:00 de la mañana y no sabemos nada más. Estaba afectado por lo que ocurrió, pero no había dado señales de querer desaparecer”.
Última imagen y extraño comportamiento
A pesar de la falta de información sobre su paradero, la mañana de este martes se presentó en el matinal Tú Día la última imagen registrada del tripulante antes de perderse el rastro. En el video, capturado mientras viajaba en un bus de transporte público, se puede ver a Sanhueza en el interior de la micro, un momento que llamó la atención por su comportamiento inusual durante el trayecto.
El video muestra que Sanhueza pagó con un billete de 10 mil pesos y se sentó en la última fila del bus, aunque minutos más tarde se cambió tres veces de asiento. Según el chofer del vehículo, quien también fue entrevistado, el tripulante parecía preocupado y se tocaba las manos y la cara de manera repetitiva, lo que despertó la alarma de quienes lo observaron.
Este extraño comportamiento ha generado aún más inquietud sobre su estado y las circunstancias de su desaparición, mientras las autoridades continúan con la investigación.