Natalia Hernández, nieta de María Elcira Contreras, publicó una emotiva y larga nota recordando a su abuela desaparecida en Limache.

Recordemos que María Elcira, de 85 años, llegó junto a su familia al Fundo Las Tórtolas para celebrar el Día de la Madre el 12 de mayo pasado. Sin embargo, después de ir al baño, se perdió su rastro.

A casi dos meses y medio de su desaparición, las investigaciones no han dado resultados.

Natalia, quien recientemente abrió su perfil de Instagram, compartió una publicación íntima mostrando la celebración de su cumpleaños en abril, en la que participó su abuela.

“Hoy tengo mucha nostalgia. Nunca sabemos cuándo será el último abrazo, el último beso, el último día, las últimas horas o incluso los últimos minutos. Nunca sabemos si tendremos tiempo de despedirnos o no de alguien”, comenzó escribiendo Hernández.

“Siento un pedazo de mi corazón desgarrado y no se nota, porque no está a la vista”, agregó, junto a unas fotos de la celebración familiar en abril pasado.

“Estas fotos corresponden a la última celebración de mi cumpleaños y me desmorona pensar que probablemente ese sería el último cumpleaños qué pasó con mi hermana y conmigo (somos mellizas)”, subrayó.

Enfatizó que María Elcira Contreras “está DESAPARECIDA, no fallecida. Y aunque me choca cuando leo que está muerta, no puedo dejar de admitir que es una gran posibilidad, por la cantidad de días que han pasado”.

Nieta de María Elcira Contreras y su conmovedor deseo

Natalia Hernández también reveló el deseo que pidió en torno a su abuela desaparecida.

“Hoy solo ruego un milagro y si pudiera pedir un deseo sería, volver a verla. Un besito más, un abrazo apretado, una segunda oportunidad, para que ella disfrute de sus años dorados”, esgrimió.

“Además, tengo una gran sensación de inseguridad e incertidumbre y siento la importancia de valorar el hoy más que nunca y atesorar los buenos recuerdos”, agregó a sus conmovedoras palabras.

Asimismo, admitió: “Me aferro a mi familia y a la fe para continuar y seguir con fuerzas en esta búsqueda. Les ruego que me acompañen compartiendo las publicaciones de mi abuela, tal vez con un granito de arena podemos llegar a ella. Si hay un testigo, por favor contáctenos”.

Por último, envió un mensaje a los ‘escépticos’: “A los que no crean en nosotros, simplemente háganse a un lado. Cuando todo esto pase, ni siquiera pedirán disculpas”, afirmó.

“No solo yo lo estoy pasando mal. Mis padres, hermanos, sus hermanos y mis sobrinos todos los días preguntan por ella y ellos son pequeños. No tienen las herramientas para comprender, por qué ella ya no está en los almuerzos de fin de semana”, concluyó.