La CIA y la manipulación mediática: Cómo promovieron un golpe en Chile a través de la prensa

CIA intervino en medios chilenos para promover golpe contra Allende

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Desde el final del siglo pasado, los Archivos Nacionales de EE.UU. han publicado una amplia gama de documentos clasificados sobre la intervención del país en Chile, que datan desde antes de que Salvador Allende llegara al poder.

Estos documentos están accesibles al público en el sitio web https://foia.state.gov/, gestionado por el Departamento de Estado de Estados Unidos.

Adicionalmente, en el sitio web https://www.nixontapes.org/ se han divulgado más de cien páginas de transcripciones de conversaciones entre el presidente de EE.UU. de aquel entonces, Richard Nixon, su asesor Henry Kissinger y otros funcionarios gubernamentales sobre la injerencia en Chile.

Esta masiva colección de pruebas históricas se complementa con numerosos libros que en algunos casos suman nueva información, mientras que en otros sistematizan la información existente. Entre estos se destaca la obra del historiador Peter Kornbluh, ‘Pinochet: los archivos secretos’, así como ‘La CIA en Chile: 1970-1973’ del periodista Carlos Basso.

Basados en esta extensa información, se puede afirmar inequívocamente que la CIA jugó un rol crucial en el derrocamiento de Salvador Allende. Sin embargo, aún existen incógnitas sobre la especificidad del papel de la agencia en las acciones militares del 11 de septiembre de 1973 y el nivel de autonomía de las Fuerzas Armadas chilenas.

Además de llevar a cabo un boicot económico y financiar a la oposición, la inteligencia estadounidense también ejecutó un plan de propaganda detallado, que implicaba la infiltración de “periodistas agentes” en los medios de comunicación, para influir en la opinión pública y favorecer las condiciones para el golpe de Estado.

“Plan de propaganda anti-marxista” de la CIA

Desde el momento en que Salvador Allende ganó las elecciones el 4 de septiembre de 1970, la CIA estadounidense se fijó dos metas claras: impedir su ascenso y, si no se podía, derrocarlo. Según un cable enviado desde la oficina de la CIA en Santiago, se afirmó que “solo el caos económico o un desorden civil serio” podría llevar a un golpe militar.

La agencia puso en marcha un plan de propaganda para retratar a Allende como una amenaza no solo para Chile sino para el mundo entero. Esto comenzó con su aparición en la portada de la revista Time bajo el título: “Amenaza marxista en Las Américas. El Chile de Salvador Allende”.

Infiltración de “periodistas agentes” por la CIA

Junto con el controvertido artículo en Time, la CIA también logró publicar artículos y noticias desfavorables hacia Allende en medios latinoamericanos y europeos. En un periodo de poco menos de dos meses, la campaña de la CIA fue de gran envergadura, contando con cientos de artículos y emisiones resultantes directamente de la actividad de la agencia.

Además, la CIA envió a Chile periodistas que eran en realidad agentes, para contribuir a la campaña de propaganda. En este corto periodo de tiempo, la agencia también financió medios de comunicación y envió material anti-Allende a líderes políticos y militares en Chile.

Injerencia de la CIA y medios chilenos durante la era de la Unidad Popular

Se sabe que los esfuerzos de la CIA para evitar la llegada de Allende a la presidencia chilena no tuvieron éxito. A pesar de numerosos intentos de desestabilización y la trágica muerte del comandante René Schneider, Allende asumió la presidencia el 4 de noviembre de 1970, respaldado por un acuerdo con la Democracia Cristiana. No obstante, la CIA dio inicio a la siguiente etapa de su agenda: orquestar un golpe de Estado.

La CIA, aunque no logró su objetivo inicial, consideró su plan propagandístico previo a la confirmación de Allende como un éxito. Por ello, decidió incrementar sus esfuerzos en la prensa.

Un reporte de la CIA del 16 de diciembre de 1970 analizó el panorama mediático chileno para identificar oportunidades de infiltración y promover sus intereses golpistas.

Medios radiales: un campo de batalla

Algunas estaciones radiales mencionadas en el informe fueron Radio Portales, descrita como “de izquierda pero independiente”, y Radio Balmaceda, identificada como de “orientación política de extrema derecha”. También se destacó la situación de la Radio Corporación, la cual fue adquirida por el Partido Socialista y más tarde atacada durante el golpe de 1973.

Televisión: foco en los principales canales

La CIA centró su atención en Canal 7 y Canal 9 por su apoyo al gobierno, y Canal 13 por ser el principal opositor. El análisis resaltó la afinidad de estos canales con ciertos grupos políticos y sus posiciones económicas.

Prensa escrita: la decisión final

La Tercera y El Mercurio fueron los diarios principales en el radar de la CIA. El Mercurio, en particular, recibió grandes sumas de dinero del gobierno estadounidense.

El Mercurio: la principal apuesta de Estados Unidos

EE.UU. no solo intensificó las acciones de la CIA en varios medios, sino que también brindó apoyo financiero significativo a El Mercurio, considerando su crucial papel en la lucha de propaganda.

Caminando hacia el golpe

La CIA aceleró sus esfuerzos golpistas tras las elecciones parlamentarias de 1973. Los documentos desclasificados revelan conversaciones y acciones dirigidas a fomentar un golpe militar.

La intervención negada

A pesar de las evidencias y los archivos desclasificados que muestran la intervención de la CIA en Chile, el presidente estadounidense Nixon y su asesor Kissinger negaron cualquier implicación.

La participación de EE.UU. en el derrocamiento de un gobierno democráticamente elegido en Chile dejó una herida en la nación que, incluso medio siglo después, no ha sanado completamente.

Fuente: BioBio Chile