Retraso lector en 3° y 4° básico: más de la mitad de alumnos vulnerables aún no dominan la lectura

Fundación Letra Libre revela serias dificultades en lectoescritura en niños chilenos, especialmente en entornos vulnerables.

Fundación Letra Libre

La situación educativa en Chile es complicada, particularmente después de la pandemia. Conforme a las estadísticas del Simce en lectura, hubo una caída de cuatro puntos (271 a 267) en 4° básico, y en segundo medio la puntuación se redujo de 249 a 243.

El cuadro en las escuelas más desfavorecidas es incluso más preocupante en lo que respecta a la lectoescritura de niños y niñas. Según datos de Fundación Letra Libre, una entidad que desde 2020 vincula a tutores voluntarios con estudiantes con problemas de lectura, más del 50% de los escolares de escuelas de bajos recursos que requieren ayuda para aprender a leer están en 3° y 4° básico.

Letra Libre colabora con aproximadamente 3 mil alumnos de 1° a 4° básico, que provienen de escuelas con alta vulnerabilidad social en 14 regiones de Chile. Las principales dificultades que enfrentan estos estudiantes son el reconocimiento de letras y fluidez, lo cual impide la comprensión adecuada de cualquier texto.

“Esto es un tema urgente. Cerca de 158 mil estudiantes pasan a 2° básico sin lograr un nivel apropiado de lectura, y esto se agrava más si consideramos que este año la mayoría de estudiantes de 3° y 4° básico están en esta situación. Esto es aún más marcado en niños y niñas en contextos vulnerables, a quienes estamos apoyando en colaboración con otras entidades como parte del Plan Nacional de Tutorías del Mineduc”, detalla Francisco Fernández, director ejecutivo de Fundación Letra Libre.

La lectoescritura: clave para el desarrollo integral de los niños.

La lectoescritura es crucial para el crecimiento integral de los niños, ya que es un proceso que supera la mera adquisición de habilidades lingüísticas. Les facilita no solo la comunicación efectiva, sino también el acceso a la información, la expresión de sus ideas, sentimientos y una participación activa en la sociedad.

Un análisis de la OCDE mostró que, en lo que concierne a competencias lectoras, solo el 1,6% de los adultos en Chile se encuentra en los niveles 4 o 5 (capaces de integrar, interpretar y sintetizar textos largos o complejos), frente al 10,5% de la media de la organización. De hecho, más del 50% de los adultos chilenos están por debajo del nivel 2, es decir, carecen de la habilidad para utilizar la lectura y la comprensión de ella en sus actividades cotidianas y laborales.

Los expertos coinciden en que esta realidad puede cambiar si se emplean diversas estrategias desde edades tempranas. Una de estas es mediante tutorías, un sistema que contribuye a cerrar brechas a través de la enseñanza y la formación de lazos.

“Un niño que no sabe leer adecuadamente tendrá problemas para comprender otras materias. A través de las tutorías, individuos que no provienen necesariamente del campo educativo pueden establecer relaciones con estos estudiantes en su tiempo libre y asistirlos a mejorar su habilidad de lectura. Lo crucial es intervenir a tiempo en niños y niñas de la educación básica, sobre todo basándonos en los datos que la pandemia nos dejó, donde más del 90% de los niños y niñas que este año ingresaron a 2° básico aún desconocen todas las letras del alfabeto”, señala Fernández.

Lectura en niños y niñas de 3° y 4° básico

En la actualidad, Fundación Letra Libre tiene cerca de mil niños de escuelas con alta vulnerabilidad social en espera de un tutor. Por ello, mediante su sitio web, está buscando mil nuevos tutores voluntarios para el cierre del ciclo escolar 2023. Los candidatos entran en un proceso de selección y luego son capacitados para facilitar el aprendizaje de los estudiantes.

“Necesitamos que los estudiantes que están actualmente en 2°, 3° o incluso 4° básico no desperdicien otro año. Estamos contra reloj, teniendo en cuenta que quedan pocos meses para el final del año académico y las tutorías requieren de cierto tiempo para producir resultados positivos”, aclara Fernández.