Daniela Ramírez logra orden judicial contra impactante acosador
El acosador llegó a crear más de diez perfiles de Instagram con el fin de hostigar a la actriz sexualmente
La Corte de Apelaciones de Santiago ha emitido un fallo en favor de la actriz Daniela Ramírez, ordenando al arquitecto Gastón May Boullon que cese el acoso sexual y las amenazas dirigidas hacia ella.
Todo comenzó en 2020, cuando la actriz de La Ley de Baltazar comenzó a recibir mensajes en redes sociales del individuo, quien primero comentaba sobre su vida personal y poco a poco creaba una falsa relación amorosa con ella.
Con el tiempo, el acoso se intensificó y llegó al punto en el que Boullon proponía formar una familia juntos, enviaba fotos desnudo y llegó a hostigarla y amenazarla personalmente.
A pesar de que Daniela bloqueó al acosador, éste creó más de 10 cuentas distintas en Instagram para seguir escribiéndole diariamente.
“Los mensajes continuaron, incluso haciendo alusión al fallecimiento u homicidio de su expareja; le compartió insistentemente material de alto contenido sexual; se trasladó a las inmediaciones del antiguo domicilio, comprometiendo con ello su seguridad; le envía fotografías en las que aparece completamente desnudo; y, videos en los que se le ve masturbándose, acompañado de comentarios en los que conmina a su representada a mantener futuras relaciones sexuales con él”, de acuerdo al fallo al que tuvo acceso BioBioChile.
En 2020, Daniela presentó una querella criminal contra el acosador, pero ésta fue sobreseída. Por lo tanto, decidió presentar un recurso de protección, el cual finalmente fue acogido. Esto logró que el acosador se alejara temporalmente, pero en 2022 volvió a hostigarla.
En agosto de ese año, el acosador se enteró de que Daniela había adquirido una nueva vivienda, por lo que se atrevió a “felicitaciones por su nuevo hogar y una fotografía del lugar y una imagen de su zona genital”.
Además, el acusado, May Boullon, negó cualquier responsabilidad en los hechos, no aceptando la integridad, exactitud e interpretación de los hechos descritos en la demanda.
A pesar de esto, el tribunal tuvo en cuenta las pruebas presentadas por la actriz y llegó a la conclusión de que el acoso y las amenazas eran reales.
En consecuencia, ordenó al sujeto a “abstenerse en el futuro de realizar actos de hostigamiento, acoso, acoso sexual, persecución y amenazas en contra de la recurrente y de efectuar cualquier publicación en redes sociales sobre la materia, que involucre la persona de la actora, su imagen y su honra”.