Tras la victoria ante Everton en el Campeonato Nacional, Colo-Colo cambia su atención hacia la Copa Libertadores, donde se enfrentará a Cerro Porteño en su debut en la fase de grupos. Este próximo desafío representa una oportunidad crucial para el club chileno, que busca revitalizar su presencia internacional y dejar atrás años de ausencia en la escena sudamericana.

El entrenador Jorge Almirón se prepara para este encuentro con la determinación de alinear a su mejor equipo, incluyendo a Arturo Vidal desde el inicio, a pesar de sus recientes problemas físicos. Sin embargo, el calendario apretado de la competición continental plantea un desafío adicional, ya que el equipo deberá disputar siete partidos en un mes.

Ante esta situación, la dirigencia de Colo-Colo ha tomado una decisión trascendental: priorizar la Copa Libertadores sobre el torneo local. Según informes de En Cancha, el club está dispuesto a dejar de lado las competencias nacionales para concentrarse en su desempeño internacional, buscando recuperar su protagonismo perdido en el ámbito sudamericano.

Sin embargo, esta decisión no implica descuidar por completo el Campeonato Nacional. La institución espera que, en caso de no lograr el éxito esperado en la Copa Libertadores, los resultados en el torneo local permitan mantener viva la lucha por el título. Para ello, confían en que los jugadores menos utilizados aprovechen sus oportunidades y contribuyan al éxito del equipo en ambas competiciones.

El debut de Colo-Colo en la Copa Libertadores está programado para este miércoles 3 de abril, cuando reciban a Cerro Porteño en el Estadio Monumental. Mientras tanto, el equipo ha logrado escalar al cuarto lugar en la tabla del Campeonato Nacional, acumulando 10 puntos en seis partidos disputados.

Con esta estrategia ambiciosa, Colo-Colo busca dar un golpe de autoridad en la escena sudamericana y recuperar su prestigio como uno de los clubes más grandes de la región.