Ricardo Gareca comenzó de manera positiva su gestión en el equipo chileno. La selección dirigida por el “Tigre” venció sin problemas a Albania, destacándose gracias a un tempranero gol de Eduardo Vargas en el campo del Ennio Tardini.

No obstante, la primera mitad se caracterizó por un incidente notable. Resulta que Alexis Sánchez mostró su descontento durante el descanso, siendo captado frecuentemente en actitud de reclamo hacia sus colegas.

El atacante del Inter, encontrándose distante de la portería contraria, fue amonestado con una tarjeta amarilla por cometer una entrada brusca sobre Kristjan Asllani, su compañero de equipo en Italia.

La frustración del exjugador de Arsenal y Barcelona se manifestó claramente en el terreno de juego, evidenciada por sus múltiples quejas a sus compañeros cada vez que el balón se perdía.

La irritación contra Albania

Esta irritación de quien es oriundo de Tocopilla fue destacada durante la retransmisión por Chilevisión. “Se mosquea porque no le llega la pelota”, comentó Claudio Bustíos desde su posición en el campo sobre el disgusto del atacante.

“¿Esto lo habrá decidido Gareca? Alexis baja mucho y pierde poder de fuego arriba”, señaló Claudio Palma, instando al “Tigre” a reposicionar con urgencia al máximo goleador.

En la segunda mitad, el jugador formado en Cobreloa se posicionó más cerca de Eduardo Vargas, mejorando su actuación respecto a la mostrada en el primer tiempo. Esto fue clave para concretar el 3-0 a favor de Chile.

“Estamos contentos porque hicimos un partido correcto. Los jóvenes corrieron por sus compañeros y eso era lo que nos faltaba. Ahora nos enfocamos en el partido contra Francia, para ver en qué nivel nos encontramos”, reflexionó un más sereno Sánchez al finalizar el encuentro.