¡IMPACTO EN EL FÚTBOL MUNDIAL! Robinho sentenciado a cumplir 9 años de cárcel
Robinho fue condenado en Italia por violación y Brasil homologó la sanción, obligándolo a iniciar su condena antes de apelar.
Robinho enfrentó cargos de violación en Italia, y la justicia brasileña validó la sanción dictada en el país europeo contra el exjugador, obligándolo a comenzar a cumplir condena incluso antes de tener la oportunidad de apelar ante esta misma corte o al Tribunal Supremo.
El veredicto de la corte disipó la incertidumbre de una posible extensión, dado que, aunque la mayoría de los jueces votó claramente por la ejecución de la sentencia en Brasil, hubo un empate respecto a si Robinho debía ser encarcelado inmediatamente o si podía apelar en libertad.
En un momento decisivo, el juez Ricardo Villas Bôas Cueva modificó su decisión, estableciéndose la mayoría a favor de la ejecución inmediata de la pena de prisión.
A la edad de 40 años, Robinho recibió una condena de nueve años de cárcel por parte de la justicia italiana por su involucramiento en una agresión sexual grupal en Milán en 2013, sin embargo, no empezó a cumplir la sentencia, ya que regresó a Brasil, nación que no permite la extradición de sus ciudadanos.
Las autoridades italianas en el caso de Robinho
El gobierno italiano pidió al sistema judicial brasileño ratificar la condena y, por ende, ordenar el encarcelamiento del antiguo futbolista para que la pena se ejecute en su nación de origen.
Robinho fue encontrado culpable de participar en una agresión sexual grupal a una mujer albanesa en una discoteca milanesa, durante su tiempo como jugador del AC Milán.
Declaraciones del juez sobre el caso
El juez ponente, Francisco Falcão, declaró que negar la solicitud de la justicia italiana sería otro atentado contra la dignidad de la víctima, ya que el “delincuente quedaría completamente sin castigo por la imposibilidad de Brasil de procesar nuevamente el caso”.
Negar la solicitud podría provocar una crisis diplomática, al hacer que Brasil incumpla sus obligaciones de cooperación, además de marcar otro momento de desprestigio para la justicia brasileña, cuya ineficiencia en castigar a criminales ha sido repetidamente criticada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El juez indicó en su fallo que “la ley prohíbe reevaluar el fondo del veredicto. Solo debemos verificar si se satisfacen los criterios para el traslado de la ejecución de la sentencia”.