El tenista chileno Nicolás Jarry vivió una semana intensa en el ATP de Buenos Aires, llegando a la final y enfrentándose a la dura rivalidad deportiva entre Chile y Argentina.

A pesar de vencer al número 2 del mundo, Carlos Alcaraz, en las semifinales, Jarry cayó en la final ante Facundo Díaz Acosta y enfrentó un trato hostil por parte del público argentino.

La rivalidad se hizo evidente, incluso cuando Jarry jugó contra rivales europeos como Stan Wawrinka y Alcaraz. Después de la derrota, expresó su experiencia en ese ambiente desfavorable.

“Claramente no es fácil jugar acá, no fui favorito en ninguno de mis partidos, tuve que estar ahí bancándomela”, confesó. Aunque reconoce que es emocionante jugar en tales ambientes, espera un trato más favorable en el futuro.

“Espero tener el próximo año un poquito más de favoritismo”, añadió.

El tenista chileno se prepara ahora para el ATP 500 de Río de Janeiro, donde enfrentará al alemán Yannick Hanfmann. Este torneo será la antesala del Chile Open, que se llevará a cabo en Santiago, donde Jarry busca defender su título.

“El público hace que este deporte sea especial. En dos semanas más voy a tener todo este público a mi favor”, destacó Jarry, anticipando su participación en el Chile Open.

Jarry debutará en el ATP de Río de Janeiro, y una vez concluido, regresará a Chile para competir en el torneo que lo vio consagrarse el año pasado.