A solo 24 horas de uno de los encuentros más esperados de la fecha 23 del Torneo, la calma previa al Superclásico fue abruptamente interrumpida por un giro inesperado en el Monumental. Gustavo Quinteros, técnico de Colo Colo, anunció la exclusión de Jordhy Thompson y Damián Pizarro del esperado duelo “por indisciplina”. Lo que parecía ser una antesala tranquila se transformó en un huracán de controversia y especulaciones.

La causa detrás de esta decisión sorprendente fue revelada: ambos jugadores habían participado en un campeonato de fútbol 7 en Maipú, un enfrentamiento que incluso escaló a confrontaciones físicas. Las imágenes del incidente, en las que se ve a los dos futbolistas involucrados, se filtraron rápidamente y añadieron combustible a la polémica. Quinteros no evadió el tema y explicó sin rodeos la situación en una conferencia de prensa, después de haber tenido una conversación extensa con los involucrados.

“Lamentablemente hay chicos que están muy bien preparados, educados, formados integralmente y no sólo juegan bien, sino que tienen una formación con la que no cometen estos errores. Otros sí. El amor por el fútbol los lleva a estos errores, a jugar partidos donde no se debe, en una semana o días cercanos a un partido importante”, declaró el entrenador albo.

Sin embargo, no dejó espacio para las especulaciones y anunció que “ninguno será convocado para el partido”.

La directiva de Blanco y Negro, el club matriz de Colo Colo, comparte la opinión de Quinteros sobre la inmadurez de los jugadores y cómo sus pasados complicados han influido en sus decisiones. Reconocen que ambos futbolistas han enfrentado carencias afectivas y han estado expuestos a entornos desafiantes. “Nada que hacer ante la inmadurez. Ambos tuvieron infancias difíciles, entornos complejos. Pasa que Damián es más piola, en cambio Jordhy tuvo todo ese tema con su polola. Sin embargo, las carencias afectivas de ambos son muy parecidas. Los dos son de poca contención y tener malas juntas”, sostuvieron al diario El Mercurio.

Según fuentes internas, Thompson y Pizarro inicialmente intentaron minimizar la gravedad del incidente, pero finalmente reconocieron su error.

El caso de Thompson es especialmente delicado debido a sus situaciones previas y a las oportunidades que podrían haber evitado si hubieran permitido su partida al Xolos de Tijuana, que ofreció un préstamo por 300 mil dólares. Aunque las fechas de regreso al equipo de los dos jugadores aún no están claras, su ausencia sin duda plantea desafíos para Quinteros en el crucial partido que se avecina en Santa Laura. El ambiente en el Monumental se encuentra cargado de incertidumbre y expectación, mientras los seguidores del club esperan con ansias saber cuánto tiempo permanecerán Thompson y Pizarro en el “congelador” del equipo.