“Estamos viviendo en dos piezas”: Exesposa de Mauricio Israel impacta por el estado actual de su hija
La exesposa de Mauricio Israel rompe el silencio tras 17 años de silencio y presenta una demanda judicial que podría marcar un antes y un después en su vida familiar.
La exesposa de Mauricio Israel, Marisol Gálvez, presentó una demanda judicial contra el conductor de televisión para exigir el pago de una pensión de alimentos adecuada para su hija adolescente. La acción legal fue ingresada el pasado 21 de noviembre, tras 17 años de lo que ella describe como “injusticias”.
“El daño psicológico ha sido horroroso”
En una entrevista con Contigo en la Mañana, Gálvez explicó que su hija no ha recibido el respaldo económico ni emocional que necesita. “Yo creo que ya ha pasado demasiado tiempo, 17 años, donde se han cometido muchas injusticias. Hay muchas mujeres que están pasando por lo que estoy pasando yo. El daño, más allá de lo económico, el daño psicológico, ha sido de un nivel horroroso”, aseguró.
Según detalló, el aporte mensual de Mauricio Israel es de 300 mil pesos, un acuerdo que, según ella, no está formalizado legalmente y resulta insuficiente para cubrir las necesidades de su hija.
Una lucha por una pensión digna
Gálvez afirmó que su hija vive en condiciones que no son adecuadas para su bienestar. “Ella no tiene isapre, todo se lo han regalado: útiles, uniformes. Me he sacado la cresta durante 17 años y creo que llegó el momento de hablar. Hoy estoy peleando por eso y por una pensión digna para ella. Ninguna adolescente vive con la plata que ella recibe”, declaró.
La exesposa de Israel también relató cómo su hija ha intentado establecer contacto con su padre sin éxito. “Ella ha buscado a su papá durante tres años y ha recibido las cosas más horribles, el rechazo. Y se me parte el alma”, lamentó.
Problemas de salud y deudas
Entre los desafíos que enfrentan están los problemas de salud de la menor. Según Gálvez, su hija sufre de una afección cardíaca y una grave depresión. El tratamiento mensual requiere ocho medicamentos, con un costo total de 300 mil pesos.
“Ya está saliendo en Dicom mi deuda en la clínica, me perjudica para encontrar trabajo. Estamos viviendo en dos piezas. Yo puedo, yo tengo cuero de chancho, pero ella no se lo merece”, afirmó. Además, hizo un llamado público a otras mujeres en situación similar a no guardar silencio.
Una decisión firme
Gálvez enfatizó que esta demanda representa un punto de quiebre en su vida. “Llegó el minuto en que yo dije: ‘Marisol, ponte los pantalones y ahora sí’”, concluyó, reafirmando su determinación de buscar justicia para su hija.