En una emotiva conversación durante el desayuno en el programa ¿Ganar o Servir?, Nicolás Solabarrieta habló abiertamente sobre la influencia de su padre, Fernando Solabarrieta, en su carrera como deportista profesional. El momento se dio cuando Pangal Andrade, capitán de Soberanos, le preguntó: “¿Qué te dio por ser futbolista?”.

“La pasión de toda la vida”, respondió Nicolás, de 27 años, mencionando que su amor por el fútbol surgió “de muy chico”, aunque admitió que “ya no volvería” a dedicarse a ese deporte. Pangal Andrade bromeó diciendo que Nicolás ya está “viejo” para regresar al fútbol.

Sofía “Sabelo” Camará también participó en la conversación, destacando que “los papás incentivan mucho que los hijos cumplan el sueño”. Nicolás, reflexionando sobre su experiencia, comentó que esta presión lo afectó en cierto momento: “Cuando muy chico, mi viejo me quería llevar a los estadios a ver partidos; y yo no quería, no quería… Y en un momento solo se me dio, se me prendió ese bichito”.

La relación actual entre Nicolás y Fernando Solabarrieta

Nicolás también habló sobre la naturaleza de su relación con su padre y el distanciamiento que han experimentado. “Mi viejo es cariñoso, es buena gente; pero de repente hay ciertos límites que no se pueden cruzar”, mencionando comentarios como “¡Que no! En qué momento pasé de un hijo que estudia en la universidad a entrar en un reality”. Estos conflictos generaron tensiones entre ellos, especialmente antes de que Nicolás ingresara a Tierra Brava a fines de 2023.

Antes de participar en el reality, Nicolás decidió enfrentar el conflicto con su padre: “Justo antes de entrar, le dije: ‘no quiero estar peleado contigo, no entraré al encierro teniendo esto en la cabeza, así que hablemos’”. Tras una conversación sincera, lograron reconciliarse temporalmente: “Hablamos, nos abuenamos y entré”, aunque Nicolás insinuó que la relación aún no está completamente reparada, diciendo que “esperemos que con el tiempo se pueda solucionar”.