Horror en Talca: Condenan a sujeto que engañó y violó a niña de 4 años tras fiesta

Condena perpetua por crimen en Talca: descubre los detalles de un caso que conmocionó a la ciudad.

Talca

En junio de 2014, hace diez años, la justicia dictaminó cadena perpetua para Sergio Alcapán Moraga, un joven de 21 años, por cometer uno de los crímenes más atroces en Talca.

La jueza del Tribunal Oral en lo Penal del Maule tardó menos de cinco minutos en declarar al sujeto culpable. Las pruebas y argumentos presentados por la Fiscalía y los querellantes eran contundentes: el hombre violó y asesinó a su vecina Daniela, de tan solo 4 años.

Horror en Talca

El trágico suceso ocurrió el sábado 28 de septiembre de 2013, en la habitación del condenado, ubicada en la población Santa Marta.

Según los antecedentes, Alcapán Moraga, conocido de la familia, participó en una fiesta con los cercanos a la niña la noche del viernes 27. A la mañana siguiente, regresó a la casa para engañar a la pequeña y llevársela a su domicilio.

Después de cometer el abuso sexual, el agresor golpeó y estranguló a Daniela hasta matarla. El cuerpo de la niña fue encontrado sin vida sobre la cama, mientras que el culpable se escondió desnudo en la cocina, intentando suicidarse con heridas cortopunzantes, pero no logró su objetivo.

Larga Condena para Sergio Alcapán Moraga por Crimen en Talca

Después de una extensa investigación que culminó a mediados de 2014, el fiscal Ángel Ávila reveló que se identificaron “dos circunstancias agravantes de responsabilidad criminal, una que es la alevosía y otra que es el haber actuado con abuso de confianza”.

Durante su testimonio, Sergio Alcapán alegó no recordar los hechos, lo que para la fiscalía fue una clara indicación de su falta de cooperación en la investigación del delito de violación con homicidio. Según el acusado, actuó bajo la influencia del alcohol y las drogas.

Consultado por un periodista poco después de su detención, el individuo expresó su arrepentimiento.

“No estaba bien cuando pasó, estoy arrepentido. Que me perdonen”, confesó, admitiendo su autoría del crimen.