El esperado Bolsillo Familiar Electrónico está a punto de regresar, brindando un apoyo económico mensual de $13.500 por cada carga familiar. Este beneficio, altamente valorado, se otorga de manera automática sin necesidad de postulación.

Bono Superior al Bolsillo Familiar Electrónico: Subsidio Único Familiar (SUF)

Si bien el Bolsillo Familiar Electrónico es un gran alivio, existe un bono que ofrece una mayor ayuda económica: el Subsidio Único Familiar (SUF). Este subsidio también está dirigido a las familias y proporciona una cantidad más elevada que el Bolsillo Familiar Electrónico.

El SUF otorga $20.328 por cada carga familiar y, en el caso de personas con discapacidad, el monto aumenta a $40.656.

Requisitos para Acceder al SUF

Para ser beneficiario del SUF, es necesario estar dentro del 60% del Registro Social de Hogares y no poder sostener económicamente a sus cargas. Los elegibles incluyen madres, padres, guardadores, cuidadores de niños o adolescentes, personas naturales a cargo de personas con discapacidad, y embarazadas (Subsidio Maternal).

Definición de Cargas para el SUF

Se consideran cargas para el SUF a:

• Niños, niñas y adolescentes menores de 18 años que participen en los programas de salud del Minsal si tienen menos de ocho años, o que sean estudiantes regulares de enseñanza básica, media o superior si tienen más de seis años.
• Personas de cualquier edad con discapacidad física o intelectual.

Cómo Postular al Subsidio Familiar

Los beneficiarios dentro del 40% del Registro Social de Hogares reciben el pago de forma automática. Aquellos en el 60% deben postular presencialmente en la municipalidad de su comuna.

Los documentos comúnmente requeridos incluyen:

• Certificado de nacimiento del niño, niña o adolescente.
• Fotocopia del carné de control de niño sano (para menores de seis años).
• Certificado de alumno regular (para mayores de seis años).
• Declaración del COMPIN que acredite la discapacidad intelectual.
• Certificado del quinto mes de embarazo emitido por un médico o matrona.
• Documento que acredite la calidad de guardador o cuidador.

Cada municipalidad puede tener variaciones en los requisitos, por lo que es aconsejable consultar con la respectiva oficina local.