Esta semana, Sebastián Ramírez ha sido centro de controversia tras acusaciones de violencia física por parte de su ex pareja, generando amplios comentarios en el programa Zona de Estrellas sobre el escándalo.

Dentro del ámbito del espectáculo, Adriana Barrientos compartió que, siendo compañera de confinamiento de Ramírez en Amor a Prueba, observó comportamientos extraños y agresivos en “Tatán”, sugiriendo incluso el consumo de sustancias.

“De repente veo que Sebastián Ramírez no estaba por ningún lado. Había desaparecido con una participante, y voy a proteger la identidad de ella porque no tengo porque ser sapa donde no me llamaron, lo voy a sapear a él”, comenzó su relato Adriana.

“Te juro por Dios que llega Sebastián Ramírez, se le desapareció a la producción media hora. Y Sebastián Ramírez llega con los ojos completamente negros, las pupilas dilatadas de una forma estratosférica”, continuó.

Entre acusaciones y especulaciones sobre Sebastián Ramírez

Barrientos describió que, minutos después, Ramírez hizo acto de presencia, y ante la curiosidad sobre lo sucedido, adoptó una postura defensiva. “Y llega con una chica, y le pregunto: ‘¿Qué está pasando? ¿Por qué ella está así, cómo rara?’”, contó Adriana.

“‘¿¡Y qué te metí tú!?’ Y Sebastián así, una cosa pero ya enfurecido por una pregunta que le había hecho yo”, dijo.

Al ser consultada en el estudio sobre qué sustancias creía que Ramírez podría haber usado durante el encierro, aunque no estaba segura, propuso su hipótesis.

“Es que no sé, porque en los cigarros que dan risa yo veo ojos rojos. No sé si toma pastillas para la depresión, de repente, toma estas pastillas que son para el gimnasio, es la única explicación que yo encuentro para Sebastián con las calugas con las que apareció en ‘Gran Hermano Chile’, me imagino que se tuvo que haber inyectado una dosis pero satánica de anabólicos y esteroides”, indicó.

Para concluir, Adriana Barrientos expresó que en aquel momento, la mirada de Seba Ramírez “daba miedo, era cómo ver a Satanás en persona”.