¿La última mentira de Zepeda? Abogada destapa inconsistencias en su relato

Nicolás Zepeda relató su encuentro con Narumi Kurosaki en Francia, revelando detalles inéditos de aquel día.

Caso Narumi Kiyosaki

El lunes anterior, Nicolás Zepeda reveló aspectos desconocidos sobre su reencuentro con Narumi Kurosaki en Francia.

Después de su llegada desde Chile, el ingeniero buscó a su antigua pareja, pero vaciló en cómo abordarla.

El 2 de diciembre de 2016, desde el vehículo que había alquilado, Zepeda observó a Narumi. “La veo venir desde el paradero hacia su edificio. No hago nada. Yo estaba dentro del edificio, en la cocina, primer piso. Había subido, golpeé su puerta, pero no había nadie”, rememoró.

“Cuando la vi me hice muchas preguntas. Entré en pánico, quise salir del edificio”, añadió.

Y llegó el momento decisivo: “El 4 de diciembre me dije que hay que forzar un encuentro con Narumi. No puede ser fortuito. No tenía su número, bloqueado en todas las redes, le golpeé la puerta y no estaba… entonces pensé en otra cosa”.

“Tomé una hoja A4 y escribí su apodo Nicomi, que era una mezcla de Nicolás y Narumi. Puse la hoja en el parabrisas y en un momento dado veo por el retrovisor que alguien viene. Era ella sorprendida, toma la hoja y la veo llorar”, narró.

Fue entonces cuando el presidente del tribunal, François Arnaud, le preguntó: “Es la primera vez que hablas de ello (mensaje escrito en el papel). ¿Por qué sucede esto hoy?”.

Él contestó: “Entiendo que sea una historia difícil de creer, pero sirvió. Aunque sea difícil de creer prefiero contarla. Sospechaba que no me iban a creer”.

Continuó su historia: “Siento que alguien toma la hoja. Salgo del auto y veo a Narumi. Llora, me mira… Me dice ‘pensaba que nunca más te iba a ver’. Lo interpreté como que estaba contenta de verme. La hice entrar al auto para hablar. Veo que está contenta de verme”.

Cuestionamiento de la abogada

Este miércoles, Sylvie Gallay, abogada de la familia Kurosaki, expresó sus dudas acerca de la confesión de Nicolás Zepeda.

“Es Narumi quien ve la notita, es ella quien se arroja en sus brazos, es ella quien le propone ir a Ornans, es ella quien toma la iniciativa de ir a su habitación… ¡Es Narumi quien le sugiere todo! No lo creo ni por un momento”, expresó.

Para ella, todo esto es “inconsistente con la realidad fáctica. Escribe una palabra en una hoja A4, ‘Nicomi’ , un apodo que nunca hemos visto en el procedimiento, aunque tenemos todos sus intercambios. Dice que lo escribe en japonés… En japonés significa ‘cocer a fuego lento’. Pero de todos modos, ¿a quién queremos engañar?”.

Finalmente, añadió un dato crucial: “El vehículo está estacionado de tal manera que no podemos verlo, a menos que desde la cocina de la residencia abramos la ventana, nos apoyemos en la pared, nos proyectemos hacia adelante, una y otra vez. Está oscuro, Narumi es miope y el aparcamiento se encuentra a unos cincuenta metros, mínimo”. Según la abogada, esta falsedad “es muy reveladora”.