El pasado lunes 16 de octubre, el Gobierno presentó un proyecto de ley destinado a agilizar la adquisición y el sueño de la vivienda propia, enfocándose especialmente en brindar apoyo a la clase media.

El proyecto, ingresado al Congreso bajo el estatus de “discusión inmediata”, introduce un nuevo subsidio a través de un beneficio tributario diseñado para fomentar la inversión en viviendas.

¿En qué consiste el Subsidio tributario para viviendas?

De acuerdo con la información proporcionada por las autoridades, este apoyo económico se materializa en forma de un crédito tributario reembolsable que asciende a un máximo de 16 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), lo que equivale a $1,000,000 anuales. Importante destacar que este beneficio no se restringe a la primera vivienda.

El proyecto, desarrollado en colaboración con la Cámara Chilena de la Construcción, propone un período de entrega del subsidio de cinco años, alcanzando un monto total de $5,000,000.

Además, se busca que sea compatible con los diversos subsidios habitacionales existentes.

¿Cómo operaría el subsidio?

En la presentación del proyecto, el Gobierno proporcionó dos ejemplos para ilustrar el funcionamiento del subsidio:

1. Persona con ingreso de $800,000: Podría acceder a un departamento de 3 dormitorios y un baño, acogido al DS1, tramo 1, con un valor aproximado de 1,400 UF. Con un subsidio de 900 UF, la persona obtendría un crédito hipotecario para financiar los restantes 500 UF, generando un dividendo de $250,000 por 20 años. En este caso, el beneficio permitiría cofinanciar cuatro dividendos al año en los primeros cinco años, proporcionando una devolución de impuestos de $1,000,000 en la declaración de renta.
2. Pareja con ingresos combinados para una vivienda de 2,400 UF: En esta situación, la persona con mayores ingresos ($1,900,000) tendría que abonar aproximadamente $600,000 en impuestos si no hubiera adquirido la vivienda. Además del crédito tributario de $1,000,000, se deducirían los intereses del crédito de la base imponible del impuesto global, lo que resultaría en una reducción de casi $300,000. En consecuencia, la persona recibiría una devolución anual de impuestos de $700,000 durante cinco años.

Este proyecto de ley busca facilitar el acceso a la vivienda propia y reducir la carga financiera asociada a la adquisición de propiedades, brindando un incentivo adicional a los compradores.